Alma de filósofa, mente de escritora, pensamientos de poeta y un destino plasmado en letras.

sábado, 27 de enero de 2018

Alguien más

Enciendo el primer cigarrillo de la semana, frustrada.

He entendido que todo lo que quiero no es todo lo que tendré.

He entendido que la vida se ha vuelto consumista en mi cabeza, mi fuego que cada noche se enciende pensándote incluso entre frías ráfagas de aire, no parece ser aplacado alguna vez.

Borré muchas cosas para comenzar de cero y estas nuevas cosas me hacen sentir que tengo algún tipo de pertenencia entre mi cuerpo y el tuyo, una pertenencia que no quiero que se vaya, una pertenencia que me abrume que me llena y me vacía.

Imaginar tu cuerpo con el de alguien más me sucede cada día, cada noche, cada mes, desde hace algún tiempo. ¿Qué puedo hacer? Lo vivo en carne propia, cada segundo. No cambia nada, sólo es frustrante, doloroso. Cada "te amo" ahogado, cada segundo en que si se me ocurre pensar en tu cuerpo el mío se vuelve un motor en llamas.

Cada segundo en que me gustaría vivir tus segundos, en que me gustaría borrar el mundo y que sólo el universo se haya hecho para ti y para mi, cada segundo que pienso y de nada sirve pensarlo. De nada sirve intentarlo.

No volverás, eso dijiste, entendí entonces que la vida fue hecha para amar en silencio, dar en silencio y seguir con un pedazo de felicidad mal amarrado.

Nunca se me borrarán del alma esas palabras que sé que son la única verdad y la única realidad que tengo por ahora sobre ti y es que no importa lo que pase, volverás cuando quieras, tomarás lo que quieras y volverás a irte.

Y no puedo negarme a semejante pedazo de satisfacción. Estoy consciente de que estarás de vez en cuando a medias y lo disfruto cada vez.

Pero aún mi cabeza no entiende como estas cadenas se amarraron y no hay manera de que suelte, no las quiero soltar, han sido las cadenas más duras y más satisfactorias que he tenido en mi vida, quise intentarlo tantas veces, ahora soy lo que realmente soy con un amago de dependencia en una sombra descarriada, un músico, soy éxito, soy tranquilidad dentro de la frustración, soy esto como siempre fui pero con cadenas en adición, esto soy yo ahora.

Soy un amor correspondido que no pasará de eso, una loca incapaz de crear una verdadera relación con nadie más por el simple hecho de que mis cadenas son tuyas, soy una vida demasiado viva, demasiado atada.

Soy una vida que se flagela y que sonríe con cada azote, soy una vida que se mantiene de un amor que no llegará al primer beso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario